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El secretario general de Vivienda visitó ayer, junto al presidente de Fundación ONCE, Casa Decor
El secretario general de Vivienda, Javier Eugenio Romero, anunció ayer que el código ético de edificación estará en la calle en un plazo aproximado de un año y reiteró que contará con un documento relativo a la accesibilidad.
"Estamos trabajando para incluir el documento relativo a la accesibilidad en el código técnico de edificación", aseguró Romero tras su visita al espacio que la Fundación ONCE para la integración social de personas con discapacidad tiene en Casa Decor 2005, donde, acompañado por el presidente de la citada fundación, Carlos Rubén Fernández, conoció cómo puede ser una casa adaptada para personas con problemas de vista, oído o movilidad.
"Conociendo esta vivienda", dijo, "no hay nada que la diferencie de una vivienda para el resto de los ciudadanos", pues está llena de soluciones "imaginativas, ingeniosas y absolutamente útiles" para facilitar la vida a este colectivo.
Javier Eugenio Romero indicó también que estas soluciones que normalizan la vida a una persona con discapacidad suponen también "un aumento de la productividad en el sector económico, puesto que muchas empresas pueden dedicarse desde ya a atender necesidades de vivienda que al final nos van a ser útiles a todos".
En este punto coincidió también el presidente de la Fundación ONCE, Carlos Rubén Fernández, quien aseguró que la adaptación del hogar es también una oportunidad de negocio para todos aquellos que viven del sector de la construcción, diseño y hotelero, ya que en toda Europa hay más de 50 millones de discapacitados y un alto porcentaje de personas mayores.
DISEÑO PARA TODOS
Carlos Rubén Fernández señaló que el objetivo de esta exposición es "hacer del diseño para todos y entre todos una posibilidad para que los seres humanos tengamos un canal más para alcanzar la plena normalización". El concepto de vida normalizada, añadió, "pasa también por tener un hogar en el que poder desenvolverse sin ningún tipo de limitación".
Además, aseguró, "esta casa está especialmente concebida para las personas con algún tipo de discapacidad, pero es una vivienda de la que cualquiera, con o sin discapacidad, puede disfrutar de ella. "El diseño para todos es posible y no tiene porqué ser más caro", aseguró.
El secretario general de Vivienda y el presidente de la Fundación ONCE, guiados por el director de Accesibilidad de la citada fundación, Jesús Hernández, recorrieron una casa en la que, por ejemplo, todas las habitaciones cuentan con pilotos luminosos que se encienden cada vez que suena el timbre de la vivienda para que las personas sordas puedan detectarlo y en la que los muebles de la cocina, baño y resto de dependencias tienen la altura idónea para una persona que se desplaza en silla de ruedas.
En el diseño de esta casa, a la que no le faltan elementos decorativos y estéticos, han colaborado el Instituto de Mayores y Servicios Sociales (IMSERSO), el Centro Estatal de Autonomía Personal y Ayudas Técnicas (CEAPAT), la empresa Vía Libre de Fundación ONCE y confederaciones de personas con discapacidad. Fuente: Solidaridad Digital