Ministerio de Educación, Fundación ONCE para América Latina y OEI impulsarán la educación de niños ciegos en Iberoamérica.

07 Abril, 2014

La ministra de Educación y Ciencia, Mercedes Cabrera; el secretario de la Organización de Estados Iberoamericanos (OEI) para la Educación, la Ciencia y la Cultura, Francisco José Piñón, y el presidente de la ONCE y de la Fundación ONCE para América Latina (FOAL), Miguel Carballeda, firmaron ayer un convenio de colaboración por el que se impulsará la educación de niños ciegos en Iberoamérica.

El convenio, firmado en la sede del Ministerio de Educación y Ciencia (MEC), prevé poner en marcha centros de recursos educativos y centros de producción de materiales para personas ciegas, así como colaborar en la formación y capacitación de los docentes que atienden a los alumnos ciegos dentro de un sistema inclusivo.

Tras la firma del convenio, la ministra Cabrera resaltó que el MEC es consciente de la importancia de lograr que el alumnado con necesidades educativas especiales reciba una educación "de calidad, acorde con sus características y necesidades, que favorezca su desarrollo y su plena integración personal, social y laboral y que garantice las máximas posibilidades a los alumnos necesitados de apoyo educativo específico".

"La adecuada respuesta educativa a todos los alumnos se concibe a través del principio de inclusión, entendiendo que únicamente de ese modo se garantiza el desarrollo de todos, se favorece la equidad y se contribuye a una mayor cohesión social", dijo la ministra, quien agregó que la atención a la diversidad es una necesidad que abarca a todas las etapas educativas y a todos los alumnos.

Entre los compromisos que incluye el convenio, corresponde al MEC "impulsar y establecer las relaciones con los ministerios de Educación de los países del área iberoamericana, para que participen en la puesta en marcha de las acciones contempladas" en él.

La OEI se encargará de la adquisición y seguimiento de los materiales, bienes y servicios, mientras la Fundación ONCE para América Latina dotará a los centros de material didáctico específico y mejorará la cualificación de los profesionales que atienden a los alumnos ciegos dentro de un sistema de educación integrado.

Según señaló el secretario general técnico del MEC, Javier Díaz Malledo, los países iberoamericanos se irán suscribiendo a este convenio por medio de acuerdos anuales. En 2006 firmarán el acuerdo Nicaragua, Paraguay y República Dominicana.

EDUCACIÓN, FORMACIÓN Y EMPLEO

Por su parte, el presidente de la ONCE y de la Fundación ONCE para América Latina (FOAL), Miguel Carballeda, subrayó la importancia de apostar por la educación, por la formación y por el empleo, y recordó que en España, en colaboración con el MEC y con diferentes administraciones autonómicas, 620 profesionales atienden a más de 8.000 de estos alumnos con necesidades especiales.

De ahí su interés por "llevar esta experiencia a nuestros países hermanos", para "tratar de dotarles de los materiales necesarios para que vivan nuestra propia experiencia", para que estos alumnos "rompan los temores a acudir al aula" y para que "no queden desplazados en el sistema educativo". Asimismo, incidió en la importancia de formar a los profesionales de la enseñanza para atender a este alumnado.

Desde su punto de vista, esta inicativa "es una forma de llevar un pellizco de solidaridad de la ciudadanía española, recogida día a día por 22.000 hombres a pie de calle", y "compartir la suerte que hemos tenido en nuestro país".

El secretario de la Organización de Estados Iberoamericanos (OEI) para la Educación, la Ciencia y la Cultura, Francisco José Piñón, recordó en su intervención la necesidad de lograr para 2015 una América Latina sin analfabetos, un objetivo marcado en la Declaración de Salamanca.

Piñón concluyó que esta tarea de alfabetización ha de incluir también a las personas invidentes, que quedarían fuera de este proceso sin el apoyo que representa este convenio.

En virtud de este acuerdo, una comisión se reunirá, como mínimo, una vez al año, para realizar un seguimiento de su puesta en práctica.